El Pico San Vicente se lleva el dudoso honor de ser la montaña con más siniestralidad de toda Cantabria. Mientras su vertiente Norte es abrupta y hostil, la Sur es más amable y permite conquistar su cumbre con mayor facilidad, aunque esta ruta también tiene sus “cosillas”.
Su altivo perfil, que se eleva sobre la población cántabra de Ramales, enseña sus dientes a todo aquel que ose encararla.
Subiremos desde Rozas descubriendo en su cima la hermosura de los valles pasiegos y, quién sabe, llegando a oler el agua salada que baña las costas más septentrionales de Cantabria.
¿Cuándo? pues ya 😉