Otros de los retos superados, y ya van……..Además este reto se avecinaba bastante interesante, ya que permitía que su proponiente, Luis, bautizara su vida montañera con su primer dosmil. Bueno, primer y segundo, porque hicimos dos de una tacada.
Pero eso no fue todo, San Millán nos guardaba una sorpresa final. Tras una elegante calcetinada hasta su cumbre, a escasos metros de su cima, va el santo y nos corta el camino con un peligoso nevero que si lo llegamos a cruzar aún estamos patinando.
Así que a trepar toca. Luis se estrena con una trepada que nos daba acceso a la cumbre que, sin ser difícil, mejor no mirar para abajo y agarrarse bien, que la cosa no estaba para bromas.
Finalmente cumbre en el techo de Burgos, reto superado, segundo dosmil y cuarta cima del día.
La bajada a Pineda de la Sierra bonita, tranquila y de raca-raca, que el paseo es lo que tiene.
Muy buen sabor de boca tras una travesía de 26 kilómetros y 1.300 metros de desnivel pal cuerpo. Porque lo valemos oyes.
La ruta la hicimos con el Bilbao Alpino, una compañía siempre agradable y con los que seguramente repetiremos excursión. Desde aquí un saludo a toda la tropa que nos acompañó en este reto 😉
En breve, el reportaje.