Esta vez acertamos con los cambios, como Caparrós (bueno, vale, en este caso a veces). Sustituir el Aitzuri por el Larrasa hizo que el Sábado nos acercáramos por tierras alavesas para ascender nuestro octavo reto: el Larrasa.
El Larrasa ha sido hasta hace bien poco una montaña fantasma, y eso que es la segunda cumbre de Alava tras el Gorbea, pero no entró en el catálogo de montes hasta 1.990, ya que anteriormente se la confundía con la cima cercana de Palomares.
La subida al Larrasa resultó ser mucho más entretenida y bonita de lo esperado. Una ascensión histórica (transcurre a través de la ruta del pescado y el vino, utilizada durante siglos para el transportes de estas mercancías), con unas vistas espectaculares, descenso prácticamente rapelando, escalada a través de la chimenea que antecede a la cumbre y una cima estrecha y muy aérea que aporta valor a una magnífica ascensión.
En breve subiremos el reportaje que no os lo podéis perder: toda una aventura.
Enhorabuena una vez mas……